Soy educador, estoy trabajando en una escuela a tiempo completo, y sin embargo, mi sueldo no me alcanza para cubrir mis gastos y las manutenciones que les corresponden a mis tres hijos.
Trabajo de lunes a viernes, y al verme en la necesidad de obtener un dinero extra para cumplir con todos mis compromisos económicos, he tenido que recurrir a laborar en lo que sea que se me ofrezca o consiga.
La precariedad laboral ha golpeado fuertemente a mi país, y en situaciones como la que estamos viviendo, no queda de otra que seguir adelante con lo primero que salga, es por ello que los fines de semana comencé a dedicarme a realizar trabajos de plomería a domicilio.
Desde muy temprano en la mañana del sábado y el domingo, salgo con mi caja de herramientas, tocando puertas casa por casa, ligando que alguien necesite de una reparación en su hogar.
Poco a poco, he ido armando mi lista de clientes fijos, así es como algunos me llaman para solicitar de mis servicios, y siendo la hora que sea, inmediatamente me dirijo hacia sus casas, y paso todo el tiempo que conlleve la solución del problema.
Precisamente esta precariedad me ha llevado a sufrir problemas no sólo económicos sino también emocionales, por tanto estrés e incertidumbre, además de salud por exigirle tanto a mi cuerpo, puesto que no paro de trabajar y trabajar, para tener una calidad de vida, y un salario digno.
La plomería incluso llegó a suplirme más dinero que la escuela donde ejercía mi profesión, había clientes que me necesitaban estando a mitad de semana, y por ello le pedía considerablemente a mi jefe que me dejara cumplir con mis labores extra, les dejaba un suplente a mis estudiantes y luego tenía que reponer esas horas de cualquier forma.
Sin embargo, mi jefe un día se acercó y me dijo que no podía continuar siendo permisivo conmigo, así que tuve que renunciar al trabajo porque la verdad es que no podía dejar la plomería, tenía mis clientes ya fijos, y hubiera sido una enorme perdida, sino continuaba con mis labores a domicilio.
Por supuesto, que no tener un trabajo fijo también trajo consigo complicaciones, porque no siempre había algo que reparar, con un trabajo de tiempo completo y otro adicional de pocas horas, me resultaba bien y podía cumplir con todos mis gastos.
Por eso acudí a internet, y estuve observando una página web, la cual es https://es.gowork.com que contiene diversas opiniones de empleadores y sus ofertas laborales, me registré y así conseguí contactar otra escuela donde trabajar. Les expliqué mi caso, y llegamos a un acuerdo para que así yo pudiese conservar mis dos empleos.
Hoy, gracias a esta maravillosa herramienta, finalmente me he establecido económicamente. Si estas en busca de un mejor empleo, seguro y confiable, visita GoWork, regístrate y de esta manera encontrarás las mejores ofertas laborales.